lunes, 7 de abril de 2008

Mi Diosología Personal

Algunos de mis ideas escritas hace varios años, me parece que hoy cuando leo a Chopra, a Dyer, Un Curso de Milagros, Conversaciones con Dios, etc. Casi puedo leer entre líneas mis escritos.

He copiado aqui algunos fragmentos de lo que llamé Amor, un documento sobre mis creencias. Los escritos son los originales, sin embargo mis miedos han desaperecido, pues hoy, en el ahora, sé quien soy, y quien es mi verdadero Padre, el Creador del todo, sé que no hay infierno, y que satanas es un invernto del hombre.

Amor

De niño, no conocí muy de cerca la iglesia, ni a Dios, sabía de la iglesia y del cristo crucificado, cuando visitaba los templos, pero no sabía quien ni que era, solo que era Dios. Dios, con un concepto de alguien que esta en los cielos, viéndonos, juzgando. Castigando. Esto lo aprendí en mi adolescencia.
No recuerdo cuando me di cuenta de Dios, ni de su función en nuestra vida. Recuerdo mi infancia con sueños de colores, y con los temores a figuras infernales, demoníacas. Brujas, fantasmas, espíritus, todo esto rodeaba mi vida, así aprendí a vivir, con temor, el cual aun a mis 31 años me pesa.

Conocer el sexo, fue algo grande. La primera vez que hice el amor tenía un poco menos de 13 años. Luego la masturbación se convirtió en mi mejor compañera. Así, muchos años. Luego, cometo el error de aceptar recibir estudios biblícos, los que acrecentaron mis temores al demonio.

Mis primeros años de universidad fui un fracaso, un fracasado. Al grado que esto me permitió llegar a considerar fuertemente el suicidio.

Solo después de contar un poco de mi historia, puedo comenzar a decir que conocí a Dios, o me di cuenta de su intervención en la vida, en mi vida!.

Al igual que usted creo en Dios, como alguien o como algo. Creo en él como una fuerza eterna de amor, de paz, de felicidad. Recuerdo sus palabras, el decir que por voluntad de Dios esta sumergido en la desgracia y la pobreza, es sin lugar a dudas la blasfemia más grande. Alguien con un afán grande por nuestra felicidad.


Encontré a “Jesús” a Cristo, hace muchos años, no en una iglesia, ni en un templo, ni con ningún ser humano. Lo encontré en mi soledad, al borde de mi colapso total. Un día esa fuerza, esa energía que es Dios, me cambio el rumbo, allá por 1992. No le puedo decir cuando ni como, solo cambié, me inyectó ánimos de vivir y de creer en mí mismo.

“Vivir es soñar, cuando los sueños se convierten en realidad eres feliz, y tu felicidad desborda en sueños de amor y vida, llegaste al Nirvana. Cuando tus pesadillas se hacen realidad te conviertes en humano, de los que ríen de los que lloran, entonces y solo entonces sos mi hermano. Hermano en la sangre, en el espíritu en Dios. Cuando los sueños y las pesadillas se convierten en realidad serás bienvenido al planeta tierra. Donde juntos Dios y hombre empezamos a compartir de nuevo nuestras tristezas y alegrías, y nos damos cuenta de quien es quien. Yo soy el ser humano, quien es Dios. Si tú quieres le puedes llamar Yahvé, Jehová, Cosmos, Ala, como quieras es posible llamarlo, yo quiero decirle Yo Soy, abba, abbito, papito chulo, tatita Dios. Es amor. Amor encarnado en un ser humano como vos y como yo, llamado Jesús de Nazaret; al cual todos decimos conocer y creo que pocos lo conocen de verdad, hoy por la mañana hablé con él, me dijo que no le molesta que no lo conozcan por que él si nos conoce y que a pesar de que es Judío, le gustaría ser Musulmán o incluso me contó que hasta de la línea del Dr. Ayala quiere ser, lastima que no es alcohólico como alguien dijo, pero que de todos modos tenemos un mismo ser.

Mi papá le llama fuerza infinita, cosmos, lo que sea, inclusive dice que los Mayas lo adoraban diciéndole a las piedras que las querían mucho, Es mucha paciencia, no le importa mucho, ya que el sabe que su amor nos da la salvación y vida eterna, que a tenido que pasar muchos siglos tratando de enseñarnos que no debemos sentirnos mal, ni con culpa, que no quiere sacrificios de ningún tipo, mucho menos los humanos, pero que de cualquier forma, le agrandan los seres humanos, que unos somos bien chistosos, pero que otros nos pasamos. Un pastor al que apreció mucho a pesar de no conocerlo dijo que es alcahuete, y el Tata Dios no se enoja porque si amarnos y hacernos participes de su amor y gloria su estado eternal y de felicidad plena es serlo, lo es. Pero que no se olvide el ser humano que todo tiene una causa y efecto, que no hay piedra que se tire al aire que no baje, algún día bajará en diferente forma, lo hará.

Dice Jesús que a él no le gustan los Nazis, pero que tampoco le gusta el capitalismo, mucho le gusto el comunismo y el socialismo, solo que carecen de algo, amor a los demás, y amar el amor sobre todas las cosas, es decir que la regaron, pero que a Carlitos Marx ya le perdonaron. Del Diablo dice poco, cree que es el lado negativo de la vida, lo malo. Pero que no le gusta hablar mucho al respecto porque no vale la pena, pues la luz ilumina las tinieblas, y que si el bolado es así, no es más que esperar que las fuerzas del universo no sigan la física, pues no se trata de Newton ni de mucho menos; se trata del amor que nos engendro en la eternidad para ser sus compañeros y que como somos un poco alocados la regamos pero que ya casi estamos de vuelta, amémonos, yo te amo tu me amas.

Ahora, mi realidad es a veces distinta, sigo creyendo en “sustos”, le temo a la oscuridad, a satanás, sobre todo al castigo de Dios. Creo que el infierno es la ausencia total de Dios en nuestras vidas. Creo fielmente en que Dios es amor y que no nos castiga, creo en la bondad infinita de Dios, y creo que soy una parte infinitesimal de Dios, que nuestra fe como dijo Cristo mueve montañas, y de nuestra fe dependen los milagros en su mayoría. Creo en la intervención directa de Dios por los hombres. Solo me imagino a Dios como una masa sapiente, infinita y omnipresente en todo y en nada.

Creo en Jesucristo, como mensajero de Dios, como fiel hijo de Dios, en su resurrección por fe. Y de la intervención divina de Dios (padre) en la vida de Jesús. En los milagros de Cristo; en sus enseñanzas, lamentablemente perdidas o manipuladas. En su amor absoluto Dios ha creado distintos avatares, mensajeros, maestros. Jesús era un maestro, que vino a libertarnos de la esclavitud del pecado, aboliendo el pecado, aboliendo la ley. Sustituyéndola con “AMOR” es decir con Dios engendrado en nuestras vidas, como fuente generadora de positivismo, como luz en las sombras. Es decir, Jesús venía del padre, como usted o como yo. Creo que cada uno de nosotros, de una manera o de otra escoge lo que quiere ser, y tiene la capacidad de cambiar su “destino” para bien o para mal. Usted podrá pensar en Cristo como una creencia, y debo decirle, no esta equivocado. Recuerda que le escribí un poco más arriba que los milagros ocurren por fe en su mayoría. Cristo no entra en esta mayoría, él escogió su vida y martirio, sabiendo que era hijo del rey, del creador absoluto, de la energía cósmica que vela por su bienestar y el bienestar del mundo. El no era diferente a usted, lo que él sabía es lo que usted hoy sabe, 2000 años después. Como maestro sabía que las religiones son, casi siempre, solo formas de manipulación. Su liberación y vida eterna son regalo de Dios, porque para ser libres no necesita nada, para ser salvo tampoco. Ser salvo en la tierra y después de la tierra, en el nacimiento nuevo, sin tiempo y sin espacio, solo necesita aceptarlo, y si usted no acepta esta “salvación” de cualquier forma es salvo. Cristo sabía que estos 33 años o los que fueran eran solo un instante en Dios, siendo Dios fueron un instante para él. Una creencia, sí, solo creencia, que es una forma de vivir más cerca de Dios, sin culpas, amando, sin dañar. Todo en esta vida, sin lugar a dudas, tiene efectos, esos son los que cosechamos. No importa que usted crea o no, solo es un camino de llegar a la felicidad, pero ojo, no solo en el cielo o el paraíso. Aquí en la tierra misma, por fe, o si usted quiere con la intervención del Gran Amigo; me gusta llamarle Padre, es lo mismo. Como niño, creo en su resurrección, en el poder de transgredir las dimensiones que dividen las etapas de la existencia, o los estadios del ser. De dejar un vehículo de carne y hueso, de carbono, de quars, para ser energía, y como tal manipularla y ser lo que desea.

Creo que el hombre ha despreciado siempre las enseñanzas y las formas de vivir en paz, en convivencia plena y absoluta.

AL final de todo esto, le digo es difícil tratar de vivir sin el bagaje que uno lleva, a pesar de que en mi corazón, creo fielmente en lo que escribo, es difícil vivir en la sociedad.

Creo en inconveniencias para el mismo ser humano, más que en el pecado.
Creo que Dios es amor, y es Yo Soy. Es él.

1 comentarios :

Unknown dijo...

BUENIO SE NOTA QYE AQUI ESTA MI MAO CON SUS ESCRITOS, SIEMPRE ME CONTASTE QUE LOS TENÍAS Y POR FIN LOS PUBLICAS, TE FELICITO MUCHO PERO BUENO ME QUEDE CONLAS GANAS DE VER FOTICOS. UN BESO. CCATA SÁNCHEZ