martes, 20 de mayo de 2008

Los Soldados que Lloraban

Una Historia. Una Guerra 29 años después. VII Parte
¿Han visto soldados llorar? Yo sí, y no me siento orgullo de ello. Son mis hermanos, son mi gente, son hijos de Dios. Les guste a ellos o lo acepten otros, son gente que siente, gente que ama. Son hijos de alguien, y estoy seguro que una madre elevaba una plegaría por ellos.

A quien protegería Dios, al soldado o al guerrillero. La oración de que madre valdrá un poco más. Que santo tendría mas influencia. Pero que párroco estará más cerca de Dios. El que santigua y bendice al ejército, o aquel cura de la teoría de la liberación que ora en silencio y bendice al ejército del pueblo. A que cura o monseñor, arzobispo o campesino. A quién escuchará más Dios. El Dios de verdad, el único, no hace diferencia.

En Noviembre de 1989, atrás de mi apartamento, cuatro o cinco soldados de la primera brigada, se sentaron exhaustos. Cansados de guerrear, de matar, quizá de huir o hasta de obedecer ordenes, pero quizá y solo quizá de tratar de sobrevivir. Como niños comenzaron a cantar, cantos de soldado, de esos que parecen cantos de boy scout. Su voz era alegre, su voz se fue tornando triste, su canto se hizo llanto; literalmente lloraban como niños, quizá por su edad; ninguno habrá tenido más que veintidós. Desde el tendedero, y por una rendija logre ver a un tipo de blanco, en shorts y camiseta, con un rifle de asalto, un Ak – 47. Ese tipo era un francotirador de la guerrilla. Él estaba en la parte de arriba de los apartamentos; y estoy seguro que él, podía con una granada acabar con todos los soldados. O tiro a tiro matarlos a todos. No lo hizo. Solo se dio la vuelta, solo se fue.

Hoy me pregunto si él considero perdonar la vida de sus enemigos, si los consideraba sus enemigos. Me pregunto también si la oración de una madre perforó los oídos de Dios. Habrá sido buena gente. O comprendía que somos hermanos.

No puedo generalizar, pero quienes pensaban así. Todos los guerrilleros, o solo algunos. Alguno dentro del ejército gubernamental pensaba igual, o quizá más, quizá ninguno.

No sé que pensó. Pero los soldados que lloraban, al menos ese día, al menos ese momento, no murieron en la víspera. Y una madre dio gracias a Dios.

5 comentarios :

Unknown dijo...

Buena historia, vi cosas similares tambien durante la ofensiva del 89.

Ahora, como has escrito un par de historias en las que protagonizan francotiradores en la Zacamil, quisiera entrar en materia militar y mencionarte sobre un equipo de francotirador guerrillero, el cual generalmente estaba compuesto asi:

-Francotirador, equipado con un fusil Dragunova 7.62 mm sovietico o chino, de francotirador, con mira telescopica. El Franco no llevaba mochila.

-Dos miembros de seguridad que, armados con fusiles de asalto y mochilas conteniendo la municion y pertrechos para el francotirador y ellos, mantenian un perimetro de seguridad para el franco, quien se dedicaba exclusivamente a buscar objetivos.

Este equipo de francotirador guerrillero era el utilizado en combates urbanos, como en la ofensiva del 89. No habian variaciones voluntarias del mismo, pues, a diferencia de en el monte, en la ciudad el equipo de seguridad era imperativo por la morfologia del terreno.

Aqui podes ver una serie de diferentes Dragunovs, aunqeu en El Salvador se utilizo mucho el modelo chino que alli se mira:

http://www.dragunov.net/

Famosa toma televisiva fue aquella de unos soldados corriendo hacia cubierto y botando sus armas, entre ellas un Light Antitank Weapon, LAW, en el pasaje Istmania de la colonia escalon. Todo, porque habia un francotirador guerrillero particularmente sanguinario que les estaba pegando solo en la cabeza a los soldados.

Pero como dicen en ingles, asi es la vida en el tropico....o la muerte, depende de cual lado de la mira telescopica esta uno.

Saludos,

Unknown dijo...

Gracias Chishi por la información, realmente interesante.

Un día me gustaría que me compartieras alguna historia, y poder publicarla.

De donde me visitas?

Unknown dijo...

Gracias, por la iniciativa de publicar alguna historia en tu blog, se aprecia mucho.

Pues yo vivo fuera de El Salvador, pero lo visito cuando puedo.

La guerra en El Salvador, para mi, particularmente en lo que concierne a la ofensiva del 89, es algo epico.

Nada menos estaba pensando que la mayoria de nosotros que hemos emigrado tenemos historias epicas que contar. Asi tal cual, Epicas, porque involucran a nosotros como sujetos de procesos historicos mas grandes que nuestras voluntades e inclinaciones. Sujetos de credito de la historia de El Salvador, algunas veces con en numeros negros a favor y otras veces en deuda, nosotros para con la historia y ella para con nosostros.

Nada menos conoci a un tipo que merita ser un personaje de novela. Fundador del Batallon Atlacatl, reencauchado 4 anyos en el batallon, emigrado a pie hacia los estados unidos con todo lo que ello implica, viviendo en mexico casi un anyo como mexicano con documentos y todo, llegado a NY, donde pasa de toda peripecia incluyendo sacar basura de las Torres gemelas el dia del talegazo y luego deportado por el ICE de vuelta a El Salvador en un proceso injusto, a pesar de tener el TPS. Injusto y arbitrario el proceso, con violaciones a todos los derechos humanos habidos y por tener, pasado a centros de detencion de deportados donde por pedir acceso al sistema legal garantizado aun para los de su condicion (pues tenia tps) tuvo que aguantar tortura (leve???) psicologica y de golpes. Amarrado a una columna y golpeado en la pasada, porque no queria firmar una declaracion que lo ayudaba a deportarse inmediatamente. Los torturadores? (leves si el termino cabe)? que mas, sino un mexico-americano y un portorriqueno.

Y luego tenes el articulo del Embajador norteamericano en El Salvador del dia de hoy, en el que, ACERTADAMENTE DESDE MI PUNTO DE VISTA, acusa a cuba de violaciones a los derechos humanos y a la libertad de expresion. Eso pasa en Cuba, es cierto. El problema es que el Embajador acusa a la cuba, donde su gobierno tiene en la base de Guantanamo a tantos presos extralegales, en las mismas condiciones que las de las carceles cubanas, sino es que peores.

Decime si no es ir por una historia epica, la vida del tipo que acabo de conocer?

Y asi, sino es por la gracia de Dios, Vamos tantos salvadorenos.

Saludos,

Unknown dijo...

Vida epica, y vaya que si. Muchas veces en la vida somos parte de una comedia, de alguien que tiene un sentido del humor bastante gris.

Tengo varias historias, "en bruto" ojala las pudieramos reescribir.

Saludos

Anónimo dijo...

Conoci en el 89 a un francotirador al que apodaban Kukulkan al parecer de oigen español el cual portaba un SVD sovietico, preferia actuar solo y era implacable.