Este poema está escrito,
para los seres del mundo,
que tengan el sentimiento
grande, como el mar inmenso ,
y espacio etéreo infinito…
Y dentro de sus arterias
sientan la huella fina, al pasar
el dolor de perder su alma,
tendida en sus amoríos
en la vida circundante…
Junto al martirio de encontrar
a , amores sin ser amado,
por el simple hecho de amar …
Pierdan sus ansias heroicas,
buscando todos deleites,
en la pérdida en los vicios,
entregados al delirio
prematuro y pueril
y con lágrimas ardientes…
Rellenando el baúl vacío,
de estímulos maternales,
en el imperio infantil
que lo tiene en el abismo,
ante el suicidio y lo empuja
clamando ese verdadero
y sincero amor filial…
Suplicando protección,
junto al divino redentor,
sentir de nuevo esos besos
y dar comienzo de nuevo,
una nueva vida digna…
Así , vuelva satisfecho
a quedar en los purísimos
y tiernos sagrados brazos
que lo durmieron sin precio,
sin cobros y renta alguna…
Asimismo, el mundo se burle
lo margine, lo critique
pero Dios lo tendrá dentro
de la corte celestial
dentro de el reino sublime …
para ese ser que buscado
ansioso su origen de amor
intocable; tiene éste
romancero iluminado
para estar donde debe estar;
hagan suyo este poema,
y la bendición de Dios
la obtendrán el su reino…
Aristarco Azul
lunes, 25 de octubre de 2010
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