Las Próximas Elecciones en El Salvador

Lamentablemente y quizá para fortuna, lo que alguien diría que es contradictorio; estoy fuera de El Salvador desde hace más de 5 años, sin embargo he visitado nuestra tierra casi cada año. Y veo en ella mucho progreso, mucho que hacer para todos.

Este que hacer va desde trabajar, pasear, robar y marear (Termino que estoy inventando para los Mareros). Ha cambiado la infraestructura pública, mejores centros comerciales, y en fin, se ve muy bien todo en apariencia, a excepción de cuando uno observa con mayor atención.

Pues cuando veo más allá de lo mencionado, sigo viendo a mis paisanos, a mi familia, a aquellos que viven en barrios y colonias populares en las mismas o peores condiciones; y con tristeza escucho que cada día dicen sentirse más jodidos; más grave aún es que objetivamente menos gente está progresando, es decir no están mejor. Lo más triste es que ahora las esperanzas ya son pocas de que las cosas cambien. Pero aún así, deben estas esperanzas continuar, porque un suicidio masivo es casi imposible e impensable.

Sin embargo el asesinato colectivo y lento es el remedio que, algunos y solo algunos de la clase dominante, están optando para nuestro pueblo; cuando digo la clase dominante, no me refiero a ricos, sino a aquellos que ostentan el poder.


Creo que es importante, que aquellos que tienen voz en estas clases, ya sea económico, político o de opinión, comiencen a pensar que están siendo cómplices de este asesinato. Muchos están en contra del aborto, de la eutanasia, y de formas rápidas de quitarse la vida o de quitar la vida, sin embargo el silencio de nuestras acciones fomenta el asesinato de miles de personas, de hambre, de desesperación, de tristeza y quizá de falta de esperanza.

Mauricio Funes, es quizá el próximo presidente de El Salvador, un cambio de gobierno es fundamental para cambiar la mentalidad de muchos, en todas las clases, pues el capitalismo esclavizante puede transformarse en un Capitalismo Humano, no habrá vuelta ni al comunismo aberrante, ni a reformas socializantes en el campo económico o de empresa privada; sino que las cosas probablemente seguirán igual. Esa posibilidad, abre una luz en el camino al cambio de verdad; la diferencia radica en despertar nuevas esperanzas. Las esperanzas de que algo cambie, de mayor enfoque social. Si ese cambio pequeño no se da, los resultados pueden ser graves, pero los salvadoreños deberán tener paciencia.

Mi madre me decía, "tendremos que sacrificarnos un poco más, pero no importa, si es con tal de quitarnos el yugo de cargar todo sobre los hombros de quien menos tiene. Pues la empresa privada se retirará y habrá más pobreza, pero después las cosas cambiarán".

Yo digo, NO, la empresa privada no se retirará, esa es una mentira tan grande como que el SOL se apagó ayer. La empresa privada no puede y no retirará sus inversiones, no lo puede hacer, desde el punto de vista del dinero como tal, quizá mucho quieran hacerlo, pero no podrán. No pueden dejar botadas todas las inversiones que han hecho, es dinero constante y sonante. Y aquel empresario que crea esto, es tan ignorante como el campesino que cree que los comunistas comen niños. Los capitales golondrina se irán, pero hacen lo mismo de cualquier parte del mundo, donde no les convenga estar, incluso de Estados Unidos de América.

La empresa privada es un baluarte de la sociedad, es una fuente primordial del cambio en El Salvador y en el mundo moderno. Ojalá, y logremos unir las clases, ojalá la gente vea menos separación

Mi oración por El Salvador es, Padre gracias por permitirnos saber que somos uno en ti, y que cada vez que hacemos algo por alguien lo hacemos por nosotros, ya sea correcto o incorrecto.

Gracias por darnos una oportunidad, y gracias por permitirnos aprovecharla y tomarla.

Si gana ARENA, que se pongan la mano en el corazón y piensen que no es explotando al pobre como el rico tiene más, que no es malo ser rico, que ser rico es una bendición de Dios, pero que esas bendiciones se comparten, pues de esa manera tendremos más todos. Pero no esperando el mal llamado derrame económico, sino con acciones, con hechos. No con limosnas, sino con reconocimiento al esfuerzo verdadero.

Amen.

Finalmente, ARENA es un PRI Mexicano, no en formación sino en consolidación, no es bueno por la esperanza del pueblo, ni por la salud política de nuestro país que un solo gobierno dirija la nación por tantos años. Miren Paraguay con el Partido Colorado.

Pastores, sacerdotes, ministros religiosos, pidan verdadera orientación a Dios, quien siempre se comunica con todos nosotros sus Hijos, y guíen al pueblo, al que ustedes optaron por dirigir de regreso a la casa del Padre. No influyan en sus decisiones políticas si no están seguros de que Dios es quien los inspira. La avaricia, la codicia, la mentira no las castiga Dios, pero en lugar de conducirnos al cielo, nos dejan varados en el camino a otra parte. Guías religiosos, oren por El Salvador, por ustedes, y no se conviertan en hipócritas ni embusteros. Dejen sus pasiones políticas y ansias de poder de lado, recuperen la cordura, y oren por Dios, que está reflejado en el pueblo entero, sin hacer distinsiones.